La novela de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) por fin llego a su fin,
lo que ya se venía cocinando desde hace algunas semanas terminó el día de ayer
con la negociación de la franquicia de los Petroleros de Minatitlán que ha
pasado a manos de Alberto Uribe Maytorena, dueño actual de los ahora
denominados Toros de Tijuana
El beisbol profesional en Minatitlán ha llegado a su fin, después de una
larga sequía de victorias la novena
veracruzana será ahora parte de la Zona Norte del país, para integrarse en el grupo
donde tendrá como rivales a los Sultanes de Monterrey, Pericos de Puebla,
Diablos Rojos de México, Acereros del Norte, Rieleros de Aguascalientes,
Broncos de Reynosa, Vaqueros de la Laguna y a los Saraperos de Saltillo, estos
últimos quienes cuentan con una nueva dirección encabezada por el empresario Jorge
Dávila Flores, que ahora estará al frente del club coahuilense.
La historia de los Petroleros en la LMB no se remonta mucho tiempo
atrás, el equipo fue comprado en el año 2006 por el entonces subsecretario de
protección civil Ranulfo Márquez Hernández, tras la promesa de campaña del
antiguo gobernador veracruzano Fidel Herrera, de traer beisbol profesional al
estado de Veracruz.
El primer recinto que vio jugar a esta novena fue en el deportivo Ixhuatlán
del Café en el 2006, contra los Rojos del Águila de Veracruz
con pizarra final de 3-1, posterior a una pretemporada los Petroleros cambiaron
su sede de entrenamiento del parque Cristóbal Colon, al Deportivo Presidente
Miguel Alemán del Puerto de Coatzacoalcos, puesto que el parque 18 de
Marzo de 1938 estaba en labores de remodelación.
Desde el 2007 hasta el 2014 este
equipo participó en la liga más grande de beisbol en México sin grandes
resultados, terminando este año en el último lugar del grupo de la zona sur con
37 encuentros ganados por 71 perdidos.
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